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Alimento de Peces para Reflexionar
Por Emma Duncan*
Aunque muchos creen que la piscicultura alivia la presión sobre la pesca del mar, los peces cultivados, como el salmón y el atún, se alimentan de pescado extraído del mar. Y si no se cambian las prácticas de la industria, el creciente número de peces cultivados podría acabar con las reservas de pequeños peces pelágicos---una fuente importante de alimento de numerosos animales, incluyendo orcas, frailecillos y otros peces silvestres.
> Anualmente se sacan de los océanos del mundo unas 80 millones de toneladas de pescado. Pero no todo acaba en nuestros platos al almuerzo. Más de la tercera parte se utiliza para hacer harina y aceite de pescado, y no todo de destina a la comida u otros productos: las dos terceras partes es para alimentar a peces en cultivos.
> La acuicultura es una de las industrias de alimento de más rápido crecimiento en el mundo. El crecimiento del sector de cultivo de la industria se debe a una demanda siempre en aumento de pescado de alta calidad, como la trucha y el salmón. Estos son peces carnívoros que en su estado natural se alimentan de peces más pequeños, calamares y otros crustáceos. En las granjas donde se cultivan, se alimentan de pelotitas hechas mayormente de harina y aceite de pescado.
> El aceite y la harina de pescado se fabrican principalmente de pequeños peces pelágicos con espinas, tales como anchoas, sardinas, caballas, arenques y pescadillas. Algunas especies se usan también para el consumo humano, pero otras, llamadas "pescado industrial", se destinan solamente a dichos productos.
> La cantidad de alimento requerido para los peces cultivados es pasmosa. El WWF ha calculado en forma conservadora, que se requieren 4 kilogramos de pescado del mar para producir 1 kilogramo de peces cultivados. La industria de la acuicultura actualmente consume el 70 por ciento de la producción global de aceite de pescado, y el 34 por ciento del total de la harina de pescado. Solamente el cultivo de salmón y trucha consume el 53 por ciento del aceite de pescado producido en el mundo. Y si sigue creciendo el cultivo de peces a la rata actual, para el año 2010 la industria de la acuicultura podría estar consumiendo toda la producción mundial de aceite, y la mitad de la de harina de pescado.
> Pero los pequeños peces pelágicos son un recurso limitado, y muchas reservas ya están a punto de su límite máximo de seguridad biológica. Numerosas pesquerías que suministran el alimento para la industria están situadas a lo largo de las costas de Perú y Chile y en el Océano Pacífico sureste. En el 2001, la Organización de Alimento y Agricultura de las Naciones Unidas (FAO) calificó a estas pesquerías como "totalmente utilizadas", o sea que ya han sido explotadas hasta su límite máximo de seguridad biológica. Estas poblaciones de peces también fluctúan por la influencia de El Niño, lo cual les hacen especialmente vulnerables a la sobre-pesca. Las pescas del pescadillo sudamericano, por ejemplo, han disminuido de 6,5 millones de toneladas en 1985, a 60 mil toneladas en 2001 como resultado de El Niño y el exceso de pesca.
> Las pesquerías del nordeste del Atlántico, otra fuente importante de la industria pesquera, se calificaron como totalmente explotadas en 1983, y sobre-explotadas en 1984. La especie en mayor peligro de extinción hoy es la pescadilla azul (Micromesistius poutassou). Estos peces ya sobrepasaron los límites biológicos seguros-- la pesca total de 1,8 millones de toneladas en el 2001 era más que el doble de la cuota recomendada por el Consejo Internacional para la Exploración de los Mares (ICES). Los científicos del ICES temen que si continúa la pesca al nivel actual, las reservas colapsarán.
> La suma de todo esto representa una crisis en el suministro de alimento para la piscicultura. "Se predice que la demanda del aceite de pescado para la piscicultura excederá los recursos disponibles dentro de la próxima década," dice Maren Esmark, Oficial de Conservación Marítima del WWF-Noruega. "No hay posibilidad de aumentar sosteniblemente la producción en ninguna de las pesquerías del sudeste del Océano Pacífico. La situación en el nordeste del Atlántico no es nada mejor, pues muchas de las reservas ya han sido sobre-explotadas.
> También será difícil aumentar el porcentaje de la pesca utilizada para aceite y harina. Perú y Chile tienen grandes poblaciones humanas y por cuestiones de su seguridad alimentaria, ambos gobiernos propugnan el uso del pescado para consumo humano. La Comunidad Europea también prohíbe el uso de ciertos pescados para fabricar aceite o harina.
> El colapso en las reservas de pequeños peces pelágicos no es problema solamente para la piscicultura. Las especies utilizadas para harina y aceite son vitales en el ecosistema marino, pues son alimento para otros peces, aves y mamíferos. La sobre-explotación implica menos alimento para el bacalao, el abadejo y el atún---todos ellos pescados de importancia comercial---sin mencionar aves marinas como el frailecillo y mamíferos marinos como la orca.
> Es irónico que la piscicultura se considera---y se comercializa---como forma de aliviar la demanda de peces del mar. "La acuacultura puede tener un rol importante en suministrar una cantidad adecuada de pescado a los consumidores," dice el Dr. Simon Cripps, Director del Programa de Mares en Peligro del WWF. "Pero en este momento, el uso de aceite y harina de pescado derivados de peces sacados del mar significa que en vez de aliviar la demanda, la piscicultura representa una presión más grande sobre las reservas naturales ya de por sí amenazadas con extinción."
> La piscicultura sostenible es posible. Algunas reservas del arenque del Atlántico colapsaron en los 1960 y 1970, pero recobraron tras reducir la explotación e implementar medidas efectivas de administración. Las reservas de pescadilla azul en el Atlántico nordeste se encuentran amenazadas mayormente porque no hay un acuerdo internacional sobre el manejo de esta especie, y no se han tomado en cuenta los consejos científicos del ICES. Una mejor administración obviamente ayudaría a salvar estas reservas.
> También hay alternativas para el uso de peces pelágicos silvestres para producir aceite y harina. El mayor uso de residuos de peces utilizados para consumo humano es una solución posible que, mayormente, se desperdician. En años recientes ha habido una tendencia de procesar el pescado en alta mar en vez de en tierra. El resultado es que vastas cantidades de residuos se botan al mar. Estos residuos podrían ser utilizados por la industria del alimento para la piscicultura.
> La industria de la piscicultura está examinando otras fuentes de alimento que no sea pescado. Una alternativa es aumentar el uso de proteínas vegetales. Hay varios ejemplos en donde la harina y el aceite de pescado pueden ser sustancialmente reemplazados por fuentes alternativas de proteína y aceite.
> Pero las alternativas también tienen sus propios problemas. Los residuos de peces superiores en la cadena de alimentación muchas veces no se pueden utilizar por estar contaminados de dioxinas y otras materias químicas. Es posible limpiarlos, pero aumentaría el precio del aceite y la harina. No todos los peces cultivados se pueden alimentar con una dieta totalmente vegetariana. Además, la cosecha sugerida de otra alternativa, el krill, podría afectar seriamente el ecosistema marino por ser parte integral de la cadena alimenticia.
> Sea cual fuere la solución que encuentre la piscicultura, deberá ser sostenible y que no afecte adversamente al ambiente."La piscicultura necesita reconocer su dependencia en ecosistemas naturales," dice Maren Esmark. "Puede ser que los pescados usados en la industria son pequeños y no muy bonitos, pero son parte esencial del ecosistema marino. Los peces cultivados deberán ser producidos como parte de un ecosistema marino saludable, y no a sus expensas. Esta es la única forma en que la piscicultura será sostenible.
*Emma Duncan es Editora Gerente de WWF Internacional en Gland, Suiza.
NOTA A LOS EDITORES
El trabajo del WWF en piscicultura sostenible
> WWF trabaja para que la industria de la acuicultura sea sostenible, donde ninguna parte de la línea de producción sea una amenaza para el ambiente natural. El WWF tiene dos preocupaciones mayores relacionadas con la expansión de la piscicultura: su intromisión en áreas marinas y costeras vulnerables, con efectos ambientales potencialmente detrimentales, y la total sostenibilidad de una industria que depende de pescados sacados del mar destinados al alimento de peces cultivados.
> El nuevo informe del WWF examina la industria del alimento para la piscicultura enfocado en Noruega, el mayor productor mundial de pescados de la familia del salmón. El informe hace una serie de recomendaciones y también un llamado a los productores de alimento para peces para que exijan documentación probando que cualquiera harina o aceite de pescado que compren tiene su origen en reservas saludables y sostenibles. El informe también insta a la industria de la acuacultura para que busque otras fuentes más sostenibles de alimento, p.ej. los desperdicios de la pesca, e investigar el posible uso de otros recursos marinos tales como bivalvos, macro-algas, o proteína vegetal.
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